PORTAL DEL SECTOR DE LA LIMPIEZA

La calidad ambiental interior consigue impulso para los próximos cuatro años

La calidad ambiental interior es uno de los ejes de trabajo del Plan Estratégico de Salud y Medioambiente 2022 - 2026, con el que el Gobierno busca reducir el impacto de los principales factores ambientales con incidencia sobre la salud. Desde la importancia de la ventilación hasta la prevención y divulgación del peligro del radón, son muchos los aspectos de la CAI que se impulsan con este Plan.

Calidad ambiental interior 

El impacto de la calidad ambiental interior (CAI) sobre la salud de las personas es cada vez más conocida y, poco a poco, entra a formar parte de las políticas relacionadas con la sanidad ambiental.

Dado que pasamos un porcentaje muy elevado de tiempo en interiores, donde las concentraciones de la mayoría de contaminantes son mayores que en el exterior, el nivel de exposición es alto y merece la pena ponerle atención para prevenir problemas de salud, como alergias, infecciones víricas, cáncer o asma.

Hace pocos días se aprobó el texto definitivo del Plan Estratégico de Salud y Medioambiente 2022-2026, desarrollado por el Ministerio de Sanidad y el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico en colaboración con expertos nacionales, en el que la calidad ambiental interior es uno de los ejes de trabajo.

Entornos interiores más saludables

Con el objetivo de proteger la salud de las personas frente a los efectos adversos derivados de cualquier tipo de contaminación del aire interior, en el Plan Estratégico se propone desarrollar una legislación nacional específica para los ambientes interiores.

Actualmente, la normativas que han ido incluyendo aspectos de CAI, con el objetivo de eliminar contaminantes que se producen durante el uso normal de los edificios, son el Reglamento de Instalaciones Térmicas en los Edificios (RITE) y el Real Decreto 732/2019, de 20 de diciembre, por el que se modifica el Código Técnico de la Edificación, aprobado por el Real Decreto 314/2006, de 17 de marzo, por el que se aprueba el Código Técnico de la Edificación (CTE) y su Documento Básico de Salubridad “HS3. Calidad del aire interior” 

Las prioridades que se establecen en el Plan están relacionadas con tres tipos de ambientes interiores diferenciados: edificios de uso particular; edificios públicos y de pública concurrencia no sanitarios utilizados por ocupantes con mayor riesgo, como niños o ancianos, y edificios públicos de uso sanitario.

Entre las acciones propuestas están promover y apoyar el desarrollo y rehabilitación del parque edificado en base a criterios de salubridad, establecer métodos de referencia para el análisis de los contaminantes, o establecer criterios de ventilación de espacios interiores de pública concurrencia, tanto para los edificios con ventilación natural como mecánica.

Plan de acción frente al radón

El gas radón tiene un papel protagonista en el Plan Estratégico. Existe abundante evidencia científica que demuestra la asociación entre la exposición al radón en ambientes interiores y el cáncer de pulmón. Este gas radioactivo, que emana de forma natural en suelos con determinadas características geológicas, está reconocido como agente carcinógeno humano de categoría 1. Esto, asociado al hecho de que un número significativo del actual parque de edificios presenta concentraciones elevadas de este gas, hace que la exposición al radón se considere como un problema para la salud pública.

Una de las principales acciones propuestas es implementar el Plan Nacional de Acción frente al Radón, tal y como establece la Directiva 2013/59/Euratom,  por la que se establecen normas de seguridad básicas para la protección contra los peligros derivados de la exposición a radiaciones ionizantes, con el objetivo último de reducir el riesgo de cáncer de pulmón atribuible a la exposición al radón. Parte la trasposición de esta Directiva es la modificación del Código Técnico de Edificación, mediante el RD 732/2019, para introducir la exigencia básica de seguridad HS 6 Protección frente a la exposición al radón que establece un nivel de referencia para el promedio anual de concentración de radón en el interior de los locales habitables de 300 Bq/m3. 

Como punto de partida para el desarrollo del futuro Plan Nacional contra el Radón, el Ministerio de Sanidad ha publicado el documento  Acción frente al radón, en el que se recopila información básica sobre el radón y sus riesgos para la salud, y se presenta un análisis de la situación en España.

Mejorar la formación y la comunicación

El Plan Estratégico incluye el objetivo de mejorar la formación de los profesionales del sector, asi como el conocimiento por parte de la población acerca de los riesgos para la salud relacionados con una mala calidad de los ambientes interiores, incluido el radón.

Se propone establecer una formación especializada por instituciones oficiales y asegurar que las formaciones ya impartidas sean reconocidas, para lo que deberán cumplir con una serie de requisitos mínimos exigidos por las administraciones públicas (AAPP) competentes.

Las campañas de información y sensibilización dirigidas a la población son otra herramienta fundamental incluida en el Plan Estratégico para prevenir riesgos ambientales en interiores, por ejemplo, los relacionados con el humo del tabaco, el radón o los compuestos orgánicos volátiles (COVNM) desprendidos por productos.

Este último punto está relacionado con la propuesta de fomentar la etiqueta ecológica de la UE para pinturas, productos de limpieza etc., asi como de promover una etiqueta medioambiental para productos generadores de emisiones de COVNM y fomentar el uso de los de menor impacto.

 

Seguimiento, evaluación e indicadores

Con el objetivo de garantizar el cumplimiento de las medidas para mejorar la CAI, se propone establecer una serie reducida de indicadores de la CAI para contaminantes prioritarios en aquellos recintos específicos ocupados por poblaciones vulnerables.