PORTAL DEL SECTOR DE LA LIMPIEZA

Editorial nº 288

La formación indispensable en tiempos de crisis

La influencia que la formación tiene sobre los niveles de empleabilidad de las personas es un debate que aunque se viene abordando desde hace tiempo a partir de múltiples perspectivas es en épocas de turbulencia económica cuando adquiere especial relevancia.

Por parte de las empresas que hasta ahora habían tenido dificultad para encontrar empleados la situación en este aspecto ha mejorado pero para aquellos que buscan empleo se ha dificultado, una de las soluciones para salir de la colas del paro es sin lugar a dudas buscar la formación adecuada.

La opinión de los expertos es contundente al identificar a los estudios de especialidades como una de las formas más eficaces para obtener ese “valor añadido” que puede ser directamente aplicado al puesto de trabajo y a la toma de decisiones estratégicas. Dos elementos altamente valorados tanto por lo que hace referencia a la empresa que le permite a través de la especialización captar nuevos clientes como por parte de los empleadores que les permite conseguir un puesto de trabajo.

A nivel Europeo, España destaca por tener actualmente una tasa de paro de aproximadamente el doble de la media de la UE. El análisis de esta evolución en función de los diferentes niveles de formación arroja conclusiones muy interesantes. Solo el 0.06% de especialistas en el sector de la limpieza está en el paro, por lo tanto, la probabilidad de engrosar las colas del paro está solamente en el segmento de los peones, o sea, la tendencia es clara cuando mayor es el nivel de la formación de la fuerza laboral mayores son sus oportunidades laborales, y como conclusión, mayor es la utilidad de estos empleados para la empresa.

De esta forma, se vuelve patente el papel tan importante que juega la formación en las oportunidades laborales de un trabajador y también en las oportunidades de desarrollo y promoción en las empresas de limpieza.

Especialmente en tiempos de incertidumbre y crisis económica como la que actualmente vivimos la formación especializada puede representar una arma poderosa que permite adquirir nuevas habilidades y reforzar las ya existentes sirviendo de protección contra las adversidades del mercado.

Por otra parte la formación se percibe como un elemento altamente motivador que suele generar importantes resultados si se sabe canalizar adecuadamente para mostrar sus beneficios. Representa un componente de gran valor agregado en la productividad del capital humano en la empresa.